4.4. Cuerpo del proyecto
El cuerpo del proyecto es su elemento central. Puede estar formado por varios capítulos, apartados y subapartados específicos que, dependiendo de la temática, la intencionalidad, la extensión, etc., del proyecto, determinan su lógica y su orden interno.
A grandes rasgos, la razón de ser del cuerpo del proyecto es alcanzar los objetivos planteados y definidos en la introducción y, al mismo tiempo, dar consistencia a las conclusiones expuestas al final.
Por lo tanto, los objetivos, los apartados del cuerpo del proyecto y las conclusiones deben estar perfectamente alineados y ser del todo coherentes. Si no es así, el proyecto se convertirá en una suma de informaciones inconexas, sin un hilo conductor que aporte sentido.
No se llega a la estructura definitiva del proyecto a la primera. Estructurar un proyecto es un proceso dinámico y puede ser que haya que modificar la estructura inicial de apartados del cuerpo del trabajo en función de la información que utilicemos y de nuestro mayor conocimiento del tema. Eso sí, estos ajustes no pueden alejarse de los objetivos del proyecto.
Esta primera aproximación a la estructura se puede hacer directamente escribiendo un primer esquema de niveles. También se puede construir utilizando herramientas digitales, especialmente mapas conceptuales. En ambos casos el proceso intelectual de elaboración del primer índice es idéntico: ordenar y estructurar el discurso para alcanzar el propósito del proyecto.