2. Tratar y elaborar la información: y después de las búsquedas, ¿qué?

2.1. Introducción

Hoy en día, obtener información pertinente sobre un tema determinado está al alcance de todos si el proceso de búsqueda de la información que se ha seguido es adecuado.

De hecho, la principal dificultad se produce por la abundancia de información. Los buscadores nos devuelven miles de resultados de búsqueda en centésimas de segundo, y esto puede hacer que nos sintamos sobrepasados.

No podemos empezar el proceso de composición y redacción de la información directamente a partir de la información en bruto que hemos obtenido de las búsquedas realizadas. Si queremos obtener los resultados esperados de manera eficiente, es imprescindible que realicemos un tratamiento previo de la información, que consiste en:

  1. Validarla y seleccionarla, separando la que es pertinente, de acuerdo con el objetivo de búsqueda, de la que no lo es y estableciendo hasta qué punto lo es.
  2. Organizarla, usando herramientas como los gestores de referencias bibliográficas.
  3. Analizarla, para profundizar en el tema.

Este tratamiento de la información a menudo es circular ya que al analizar la información unas fuentes nos llevarán a otras que, a su vez, también tendremos que validar, seleccionar, organizar y analizar de nuevo.